domingo, 6 de noviembre de 2016

Dispepsia: Síntomas, causas y tratamientos



La dispepsia o los trastornos digestivos funcionales es una afección común, que se caracteriza por una digestión difícil y con dolores puntuales o crónicos según los casos. 

A continuación un panorama sobre sus diferentes síntomas, causas y tratamientos. 

Síntomas

La dispepsia designa trastornos digestivos, incluyendo síntomas variados localizados como náuseas, eructos y dolores generalmente a nivel del lado superior del abdomen. 

Estas manifestaciones también se acompañan de aerocolia, gases intestinales, una saciedad precoz desde que se empieza a comer, estreñimiento o diarrea. 

El ardor de estómago es una forma de dispepsia. 

Causas

Las causas de dispepsia son difícilmente identificables en la ausencia de lesión. Las causas más frecuentes de trastornos digestivos funcionales son una comida copiosa, el exceso de grasa o alcohol, una mala masticación o comer demasiado rápido. 

Ciertos factores como el embarazo, la práctica de un deporte de resistencia, el estrés, la ansiedad, las enfermedades crónicas como la diabetes de tipo 2 y la toma de ciertos medicamentos pueden ser la causa de trastornos digestivos funcionales. 

Tratamientos

Por lo general, los síntomas de la dispepsia son pasajeros y desaparecen después de algunos días. Es recomendable consultar con un médico si los síntomas persisten y se vuelven frecuentes. 

En ciertos casos, los síntomas de la dispepsia pueden ser aliviados por una modificación de las costumbres de vida y los hábitos alimenticios. Dejar de fumar, la práctica de una actividad física regular y una pérdida de peso forman parte de las medidas más eficaces. 

El médico también puede prescribir un tratamiento medicamentoso según la causa de la dispepsia, como antiespasmódicos para reducir las contracciones de los músculos digestivos y los dolores, los antiácidos o los estimulantes. 

Si la dispepsia es debida a la toma de ciertos medicamentos, la interrupción del tratamiento es aconsejado. 

Prevención

La dispepsia puede ser evitada adoptando una alimentación variada y equilibrada, tomándose un tiempo para masticar bien los alimentos, bebiendo por lo menos un litro de agua al día y practicando una actividad física. Es recomendado evitar los excesos de alcohol, tabaco y limitar las comidas copiosas.

lunes, 15 de agosto de 2016

Alimentos que hay que evitar si tienes el ácido úrico alto

Persona lavando hojas verdes en el fregadero.


El exceso de ácido úrico en sangre es uno de los factores que predisponen a tener gota, enfermedad que ha aumentado un 50 por ciento en las dos últimas décadas y que tiene una prevalencia del 5 por ciento en hombres mayores de 70 años en España, según los datos de la Sociedad Española de Reumatología (SER).


En los casos en los que los niveles elevados de ácido úrico dan lugar a esta patología se forman unos cristales de urato que se depositan en las articulaciones y otros tejidos. Aunque es una de las pocas enfermedades reumatológicas que se cura, la gota debe tratarse ya que, según los especialistas, puede dar lugar a lesiones articulares y afectar directamente a la calidad de vida del paciente.


Los expertos señalan que para reducir el ácido úrico hay dos aspectos cruciales: disminuir el peso (especialmente si está obeso) y mantener una alimentación equilibrada, sin olvidarnos de que en la dieta para controlar el ácido úrico no hay nada prohibido, pero sí limitado.


Respecto a la pérdida de peso, los especialistas destacan que debe realizarse poco a poco, ya que si la dieta es muy baja en calorías se produce también un incremento de los niveles de ácido úrico.

Las grasas animales y los alimentos ricos en purinas son los que deben limitarse. Entre éstos destacan las vísceras, los caldos concentrados, las salsas y las sopas hechas con trozos de carne. Pescados, principalmente pescado azul, como las sardinas, los boquerones, las anchoas, los salmonetes, las gambas, la caballa o los mejillones.


Otros alimentos que también tienen que reducirse son los cereales integrales y los productos elaborados a partir de ellos, como el pan integral; las legumbres, algunas verduras (champiñón, cebolla, espárragos, coliflor, espinacas), el café y el té.


Además, los expertos especifican que conviene seguir una alimentación que incluya huevos, lácteos, verduras (excepto las ya citadas), cereales no integrales, patatas, azúcar, pastas y miel.



Riesgoso presentar índices elevados de ácido úrico


Contrario a otras enfermedades, como azúcar elevada en la sangre (diabetes), colesterol alto, triglicéridos altos; poco se conoce sobre qué significa tener el ácido úrico alto
En caso de tener ácido úrico elevado en la sangre, es importante disminuir sus niveles. De hecho, es igual de importante que reducir los de colesterol y triglicéridos.


Estudios recientes han demostrado que tener ácido úrico elevado es un riesgo para el corazón y debe dársele la misma importancia que otros factores de riesgo de enfermedad cardiovascular, indicó el coordinador delegacional del Departamento de Nutrición y Dietética del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán, Elmer Chan Canto.

Cada vez son más las personas que al realizarse su chequeo anual con el médico reciben la noticia de niveles elevados de ácido úrico. Contrario a otras enfermedades, como azúcar elevada en la sangre (diabetes), colesterol alto, triglicéridos altos; poco se conoce sobre qué significa tener el ácido úrico alto.

El principal problema asociado a los niveles elevados de ácido úrico es que provoca una disminución del óxido nítrico, mismo que favorece la hipertensión arterial; de igual manera se facilita la formación de placa de colesterol sobre los vasos sanguíneos.

Por lo tanto, si quiere proteger su corazón, debe disminuir sus niveles de ácido úrico. De hecho, es igual de importante que reducir sus niveles de colesterol y triglicéridos.

La mayor parte del ácido úrico se disuelve en la sangre y viaja a los riñones, donde sale a través de la orina. Si el cuerpo produce demasiado o no elimina lo suficiente, la persona se puede enfermar; los altos niveles de ácido úrico en el cuerpo se denominan hiperuricemia. Entre más tiempo se mantenga, mayor es la posibilidad de llegar a desarrollar gota.

El ácido úrico es producto del metabolismo de las purinas (componentes de ciertas proteínas), y se produce de forma natural en el organismo. Al existir más purinas en el cuerpo, aumentan las concentraciones de ácido úrico en sangre.

La acumulación se da por alteraciones en el metabolismo del ácido úrico, que pueden ser heredadas. Hay dos factores de riesgo que son no modificables: la edad avanzada, por lo tanto, personas que ya han mantenido por varios años los niveles de ácido úrico elevados, tendrán mayor posibilidad de presentar signos y síntomas de la gota; de igual manera, los hombres tienen cuatro veces mayor riesgo que las mujeres de desarrollar la enfermedad.

Hay factores que se pueden cambiar, mismos que ayudan a disminuir los niveles o a prevenir el aumento. Encabezando la lista están los relacionados a su dieta y estilo de vida ya que los mismos cambios en la alimentación que se recomiendan para prevenir otras enfermedades crónicas (como diabetes, hipertensión arterial, hipercolesterolemia), le ayudarán a disminuir los niveles de ácido úrico y prevenir el desarrollo de gota.

El consumo de cerveza y otros licores, es lo que tiene mayor efecto en los niveles de ácido úrico. La carne roja y el pescado también favorecen su aumento; reducir el consumo de éstos es una de las principales acciones a tomar para prevenir.

De igual manera, la carne roja es la principal fuente de grasa saturada en la dieta, la cual se asocia a resistencia a insulina y enfermedad del corazón, en especial los embutidos derivados del cerdo (jamón, mortadela, salchicha, tocino, etcétera).

La fructuosa también es causa de aumento en el ácido úrico. La fructosa es el azúcar principal de las frutas, pero no son éstas las que contribuyen a su aumento; el principal problema son los alimentos que traen adicionada la fructosa, éstos son la mayoría de productos empacados como galletas, barras de cereal y jugos de frutas azucarados. De hecho, muchos productos bajos en calorías utilizan la fructosa dentro de sus principales ingredientes.

Evidencia reciente también ha encontrado que existen factores de la dieta que ayudan a disminuir los niveles de ácido úrico. Estos alimentos son los lácteos y las fuentes de vitamina C, los cuales coincidentemente protegen contra hipertensión, diabetes y enfermedad cardiovascular. La recomendación de consumir lácteos bajos en grasa, es de especial importancia para cualquier persona con gota o hiperuricemia.

La diabetes entra en la lista de principales causas de mortalidad de la OMS

diabetes-en-el-mundo

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha modificado la lista de principales causas de mortalidad en el mundo incluyendo algunas novedades.

Siguen en esta lista enfermedades que no se pueden transmitir entre personas, como son las enfermedades del corazón y las patologías cerebrovasculare; pero la mala noticia es que, entre ellas, aparece la diabetes por primera vez en la historia, en sustitución de la a tuberculosis.

Dos de cada tres muertes en el mundo se deben a este tipo de enfermedades no transmitibles: la principal de todas ellas es la enfermedad cardiovascular; le siguen las infecciones respiratorias, la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), las enfermedades que producen diarrea, el VIH, los cánceres de traquea, bronquios y pulmón, la diabetes, los accidentes de tráfico y las muertes prematuras.

La cosa cambia entre países ricos y pobres: en los primeros, las enfermedades no transmitibles suponen casi el 90 % de las muertes, mientras que en los segundos, no llega al 40 %, siendo el SIDA, la malaria y las infecciones que producen diarrea algunas de las peores enfermedades con las que se enfrentan.

La OMS advierte que el tabaco sigue detrás de una grandísima parte de muertes en todo el mundo, siendo el principal causante del cáncer pulmonar, la enfermedad cardiovascular y la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica).

lunes, 8 de agosto de 2016

CÁNCER DE TIROIDES: NÓDULOS EN EL CUELLO



El cáncer de tiroides es una enfermedad que durante las últimas tres décadas ha aumentado en el mundo. Una de cada dos mujeres de 50 años presenta un nódulo, y entre 5 y 10% de estos corresponden a un cáncer.

“Para saber si estos nódulos son malignos se considera una serie de factores: historia clínica del paciente, examen físico, estudio de imágenes e histología. Es entonces cuando uno puede determinar si se trata de un cáncer o es un caso sugerente de cáncer”.

Los pacientes pueden llegar con síntomas, como la presencia de un nódulo de consistencia firme que crece rápidamente, cambios asociados como disfonía y/o la constatación de ganglios aumentados de tamaño junto con el nódulo, o bien, ser diagnosticados en forma incidental. “Lo habitual es que los pacientes consulten a un médico por una situación en particular y que, producto de ello, se realice una exploración al cuello donde se palpe el nódulo”.


“Además del examen físico y el historial clínico, el paciente debe efectuarse una ecografía de tiroides. De esta forma, y según las características imagenológicas, se decide hacer o no una punción, para el posterior estudio histológico. Con el conjunto de variables se decide el paso a seguir: desde la mera observación clínica y ecografía al cabo de unos meses, a la repetición de la punción o directamente la cirugía. Lo importante es que la decisión que se tome sea individualizada según cada caso”.


 Dr. Luis Arturo Gomez Hernandez
CITAS al: 3823.1001 y 3823.1002 | Av. Plan de San Luis No.1776

¿CUÁNTO INFLUYE LA OBESIDAD INFANTIL EN UNA FUTURA DIABETES?



El 90% de los pacientes diabéticos corresponden a diabetes tipo 2, asociada a la obesidad,una enfermedad que cada vez se diagnostica más tempranamente, siendo en la actualidad, frecuente en la adolescencia.
 
La cantidad de grasa en el organismo se vincula directamente a las dificultades que tiene el cuerpo para poder manejar la glucosa (el azúcar), por lo que es una situación compleja cuando el exceso de grasa comienza en la infancia y se extiende por toda la vida.
 
“Agrava el pronóstico el hecho de que no se le considere como una enfermedad a buscar y su diagnóstico sea tardío, pudiendo llegar tener un peor pronóstico que la diabetes tipo 1 (insulinodependiente)”, señala el experto.
 
El peso es un probable factor de riesgo, por lo que es importante considerarlo desde el nacimiento. Tanto los recién nacidos con peso menor a 3.000 gramos como quienes superan los 4.000 gramos suelen tener enfermedades metabólicas a futuro.
 
“El control de niño sano detectará precozmente las curvas de peso anómalo y, tanto la enfermera como la nutricionista, orientarán a la madre a tener los cuidados necesarios para evitar la obesidad. El pediatra buscará en forma activa la presencia de complicaciones en este niño ya enfermo de obesidad”, sostiene el doctor.
 
El alejarse del pediatra durante la adolescencia suele abandonarse el diagnóstico, y entonces son los padres los llamados a buscar ayuda directamente con los nutriólogos al ver en sus hijos un sobrepeso creciente y malos hábitos alimentarios, recomienda el especialista. 


Dr. Luis Arturo Gomez Hernandez
CITAS al: 3823.1001 y 3823.1002 | Av. Plan de San Luis No.1776

10 BUENAS RAZONES PARA DEJAR DE FUMAR



Estos son hechos, no sugerencias ni recomendaciones. Léelos y convéncete de que dejar de fumar es la mejor elección.

 
  • Infarto de miocardio: un año después de dejar de fumar, el riesgo de sufrir un infarto de miocardio se iguala al de una persona que no haya fumado nunca.

  • Sustancias cancerígenas: cada vez que se aspira, se inhalan más de 3000 sustancias químicas tóxicas, la mayoría cancerígenas.

  • Nivel de monóxido de carbono en sangre: disminuye a los pocos días de dejar de fumar.

  • Cáncer de pulmón: el riesgo de padecer cáncer de pulmón disminuye progresivamente desde el día en que se deja de fumar.

  • Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC): los pacientes con EPOC, consiguen detener el avance de esta enfermedad dejando de fumar.

  • El aspecto y salud de la piel mejora: a los pocos días de abandonar el hábito de fumar.

  • Otras enfermedades asociadas: al dejar el cigarro disminuye también el riesgo de padecer otras enfermedades como cánceres de esófago, de lengua, de vejiga o la fibrosis pulmonar.

  • Ahorro: una persona que fume un paquete al día, dejando de fumar puede ahorrar más de 1.000.000 de pesos al año.

  • El rendimiento deportivo mejora: a los pocos días de dejar de fumar.